Entradas

“Si España llega a ser rescatada no podrá ni decidir sus recortes”

“Si España llega a ser rescatada no podrá ni decidir sus recortes”

“Si España llega a ser rescatada no podrá ni decidir sus recortes” Juanmi Armuña, Ceuta.

El ceutí Arjan Sundardas ha sido galardonado como Mejor Profesor de Escuelas de Negocios en la asignatura de Dirección de Sistemas de Información en el IE en los premios Asia 2011, otorgados en Singapur. Se trata de una concesión que ha tenido incluso repercusión en medios nacionales como el ‘Economista’, con una información titulada “Dos profesores de escuelas españolas ‘conquistan’ Asia”. En una entrevista con este medio habla del premio y de la economía en general.

“Si España llega a ser rescatada no podrá ni decidir sus recortes” –Cuéntenos cómo recibe este galardón en los Premios Asia.

–Es un galardón que se concede por nominación y para que te lo den alguien te ha tenido que nominar. Es algo parecido a los premios Nobel: alguien lo propone y luego se estudia a través de los currículums y con una investigación sobre el desempeño de la carrera del nominado. En estos Premios se han elegido profesores por cada una de las áreas dentro de las Escuelas de Negocio, a mí me premiaron por mi ocupación habitual en el Instituto de Empresas, que es de Sistemas de Información.

–Este galardón viene como un sello más de calidad para la Escuela de Negocios del Mediterráneo.

–Yo creo que sí. Ya no es el hecho de que me hayan dado a mí un premio como profesor, sino que nuestro claustro está formado por profesores que perfectamente podrían haber recibido cualquiera de esos premios. Por unos motivos los tienen o no los tienen, pero muchos de ellos cuentan con determinadas distinciones. El 50 por ciento de los profesores de la Escuela de Negocios fueron el año pasado mejor profesor dentro del programa en que daban clase en el Instituto de Empresa, por lo que ya tienen distinciones dentro de la propia Escuela. Yo esta distinción no la tengo, tengo esta otra. Con este tipo de premios te alegras muchísimo y refuerzas más la percepción de los alumnos, porque al final nuestros clientes son nuestros alumnos y lo más importante es que ellos estén satisfechos con sus profesores. Los premios están bien pero la satisfacción de los alumnos es lo que al final hace que la Escuela siga funcionando.

“Si España llega a ser rescatada no podrá ni decidir sus recortes”–¿Cuáles son las claves para ser un buen profesor en su materia?

–Sistemas de Información es una materia gris, oscura y desconocida porque no hay números y todos pueden opinar.Entonces es una asignatura donde, de entrada, los directivos tienen lagunas, y es complejo porque hay mucha tecnología por detrás y siempre hablamos con muchas siglas como ADSL, GPS o CRM que hace que el directivo se distraiga o no se entere y se pierda al segundo o incluso al primer día. De esta manera, para ser un buen profesor de mi asignatura lo que debes hacer es transmitir las bases, los fundamentos, la realidad y las acciones causa-efecto. Si consigues dar un buen servicio a los usuarios mejorarás resultados, ahorrarás costes y aumentarán los ingresos. También es importante usar el método del caso, usar casos prácticos.

–Usted ha colaborado en distintos medios de comunicación nacionales de gran tirada, ¿qué le han aportado estas publicaciones a su carrera profesional?

“Si España llega a ser rescatada no podrá ni decidir sus recortes” –Yo creo que el contacto con los medios es muy importante y parte de la responsabilidad de un docente de la Escuela de Negocios. Normalmente somos profesionales en nuestra primera vida, y luego tenemos una segunda o tercera en la que devolvemos a la sociedad esa formación que nos dio un tiempo atrás. El contacto con los medios es para la divulgación, porque no todo el mundo puede o quiere ir a una Escuela de Negocios. Yo me acuerdo el otro día que le explicaba a mi padre qué es la prima de riesgo, pues eso se puede hacer a través de los medios para llegar a mucha gente. Por ello, este contacto, totalmente altruista, es de divulgación. Tenemos claros ejemplos, como el del profesor Leopoldo Abadía, que siendo experto en cosas complejísimas las explica de una forma tan sencilla para que todo el mundo la entienda. Por ejemplo, en la Escuela de Negocios bajamos los términos técnicos para que un directivo que no sea experto los pueda entender perfectamente sin que tenga que hacer un master específico de un año sobre un tema en concreto.

–Pongamos un ejemplo, explique en pocas palabras qué es la prima de riesgo.

–Pues la prima de riesgo es un diferencial, es decir, cuánto de más te pido por el riesgo que tengo de que no me pagues. Es así de sencillo, lo oímos todos los días pero desgraciadamente no nos lo explican. Quizás deberían explicárnoslos en el Bachillerato porque realmente nos afectan en el día a día en nuestras hipotecas y en nuestra economía.

–¿Debería el lenguaje periodístico adaptarse más al de las personas?

–Al final es responsabilidad de las personas que profesionalmente nos dedicamos a ello el colaborar con los medios, y dentro de esa responsabilidad está ayudar y publicar cosas e ir poco a poco creando un pequeño diccionario de términos empresariales para que la gente cuando lea un periódico o un telediario entienda todo lo que se dice. Yo creo que no es responsabilidad de los medios, ya que demasiado hacen difundiendo y divulgando noticias, considero que es más una labor de los colaboradores que ayuden de forma altruista.

–Es casi obligado preguntarle cómo ve la situación actual de España, si requerirá o no un rescate.

–Dios quiera que no, porque realmente todos lo sentiremos. Lo estamos viendo en Grecia. Yo creo que España es un país con buenas bases, con buenos empresarios y con materia prima muy buena y formada porque en los últimos años nuestra juventud se ha formado muchísimo. Hay que tener la esperanza de que eso no va a ocurrir, pero sí es cierto que los mercados son complejos y puede ocurrir cualquier cosa. Yo personalmente creo que no va a ocurrir porque entre otras cosas se pondría en riesgo el Euro y no creo que Europa pueda permitirse este lujo.

–¿Cómo afectaría a la población española que este país fuera rescatado? ¿Se producirían más recortes?

–Pues lo pasaríamos mal, muy mal. Habría recortes, que puede haber aunque no seas intervenido, pero éstos no los decidiría ni el pueblo ni el gobierno español sino otros, y eso es malo. Es decir, lo importante es que los españoles decidamos por nosotros mismos qué recortes queremos hacer, porque vamos a tener que hacerlos y yo creo que toda la sociedad y los partidos, aunque no nos guste reconocerlo, lo saben. Hay épocas buenas y malas, la economía es cíclica y estamos en un momento bajo, probablemente la gente de mi edad no ha vivido uno tan bajo en la carrera profesional pero al final ésto es muy parecido a la economía familiar. Un país no es una empresa pero sí se parece mucho a una familia. Lo importante es que decidamos dónde queremos apretarnos el cinturón y que no venga alguien de fuera para hacerlo, porque no tendrán la sensibilidad local a nivel país que tenemos nosotros.

–¿Considera que tardaremos mucho en remontar?

–Depende mucho de las medidas que se tomen y cómo se tomen. Es complicado hacer previsiones ahora cuando estamos a tres meses de las elecciones y no sabemos ni qué partido va a gobernar ni su programa político, sería un brindis al sol.

–¿Es oportuno convocar elecciones con tan poco espacio de tiempo y en esta situación?

–El presidente las ha convocado, vivimos en una democracia y esperamos que vayan bien, salga el mejor gobierno que pueda salir y que todos los españoles votemos lo mejor para España.Dudar de eso es crear inestabilidad económica. No hay que darle más vueltas, lo que tenemos que hacer es trabajar de aquí a las elecciones, y después de éstas en hacer que la economía esté lo más estable posible.

–¿Qué le diría a los políticos estatales y locales si estuvieran en su Escuela?

–Refraseo a un buen amigo que fue director general de Terra España y que es subdirector general del Instituto de Empresa, Julián De Cabo, también profesor de Sistemas de Información, y es que en la vieja economía, él se refería a la de 2001, beneficio es igual a ingresos menos gastos. Y en la nueva economía, beneficio es igual a ingresos menos gastos. Es decir, lo que tenemos que hacer es que en una economía en la que no podemos controlar los ingresos, controlar los gastos.

–¿Considera que se está gastando demasiado?

–No, simplemente que los ingresos están disminuyendo. Los conceptos de mucho o poco son absolutos, y yo creo que los conceptos absolutos son subjetivos. Por ello, decir si se gasta mucho o poco sin saber lo que se ingresa es complicado. Lo que sí es importante, y de hecho lo hacemos en nuestras casas, es no gastarnos más de lo que ingresamos. O buscamos nuevas fuentes de ingresos con los mecanismos tradicionales como aumento de impuestos o crecimiento de empresas, y no voy a decir cuál es la otra porque al final todos cogen esa opción, pero lo importante es que sepamos mantener los gastos.

En mi puesto actual en el Colegio de Registradores, el año pasado disminuimos en casi un 20 por ciento los costes sin despedir a ninguna persona y sin que el servicio se viera afectado. No es fácil, sino todo el mundo lo haría, pero los tiros van por ahí: por ser eficientes. Es un tema difícil y los recortes son desagradables porque afecta a los servicios, a las personas y limita mucho. Es fácil ahorrar, lo difícil es hacerlo sin que el servicio se vea afectado. Yo creo que nuestros políticos y gobernantes son personas inteligentes y preparadas y van a saber hacerlo. Es duro pero no queda otra.

–¿Y a los ciudadanos?

–Que piensen por un lado que las normas han cambiado. Antiguamente cuando los países teníamos cada uno nuestra moneda teníamos la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre donde se fabricaba el dinero controlado por el Banco de España. Entonces en un momento determinado podíamos estar tentados a fabricar dinero, aunque provocaba unos efectos económicos que están perfectamente estudiados como el crecimiento de la inflación, devaluación, etcétera. Hoy día ya no podemos hacerlo y aunque nos sintamos tentados, desgraciadamente o por suerte, estamos en una moneda única y hay un Banco Central que es el que decide, y lo hace sobre países que están yendo a distintas velocidades. Con lo cual yo le pediría a los ciudadanos que sean conscientes de que hay unos ingresos y unos costes a nivel de Estado y que desgraciadamente hay momentos en los que tenemos que renunciar a algo o limitarnos algo, porque eso nos va a permitir que en el futuro nos vaya mucho mejor. Todos hemos pasado un momento económico difícil pero sabes que cuando las cosas vuelvan a ir bien vas a tener de nuevo una vida plena de gasto económico. Sin embargo si cuando estás pasando una etapa difícil te endeudas más no vas a salir del agujero nunca. Todos somos conscientes de la situación, aunque no nos guste. Es un tema de esperar a que se reactive.

En la parte buena, en España hay proyectos emprendedores y gente emprendedora como Amancio Ortega, que de la nada montó Zara, y también tenemos empresas como El Corte Inglés, El Caballo o Telepizza, que compitió con cadenas internacionales y ha crecido. Esto provoca que se genere empleo y son las cosas que pueden provocar que se produzca una mejora económica. Está claro que alguien que hace un proyecto tiene una vocación de ganar dinero pero eso lleva consigo crear empleo, ser responsable con la sociedad y contribuir con los impuestos. Parece que hay solución.

–Parece también que en los últimos tiempos la sociedad está un poco descontenta con los poderes públicos.

–Estamos en un estado democrático y la sociedad cada equis tiempo tiene derecho de votar y lo que casi tendría que tener es una obligación porque realmente es el momento en que nos podemos quejar y decidir hacia dónde queremos ir. Así, en vez de estar descontentos deberíamos leer los programas electorales de los partidos, informarnos y preguntar, y luego evaluar y votar. Quejarse sólo es una excusa de mal pagador, yo creo que el camino no es ese sino estudiar los programas y exigir a los partidos que no hablen de tecnicismos sino de cosas entendibles por el pueblo y la ciudadanía.

0